lunes, 28 de marzo de 2011

Sin vértigo

No quiero desencadenar ilusión o emoción en una vida en la que no aparezcas, puesto que si bien es innegable que el amor se nutre muchas veces de mentiras piadosas, también creo, ciertamente, que el punto de inflexión en el que te has convertido pone el punto y aparte en una historia que en muchos capítulos acabó carente de nexos. Es ahora, justo ahora, cuando un nuevo párrafo ha comenzado. Y si bien es verdad que al mirar atrás podemos tener cierta sensación de vértigo melancólico, es hoy cuando el mundo ha vuelto con un amanecer diferente. No nuevo, para qué engañarnos, pero sí lo que en él vemos. Y yo reparo en todo un impulso que exijo aprovechar para que el salto llegue lo más lejos posible para poder engancharme a ti en el vuelo y empaparme de vida, de arco iris, de mapas y brújulas, de flashes y lomos, de muecas y pestañeos, de humor y serpentina, de vino y una rosa sobre la mesa de nuestro sexo, la que nos invita a seducirnos y emborracharnos de luz en cada rayo que atraviesa nuestras almas, nuestros instantes compartidos, nuestros gélidos ardores cargados de purpurina, de incandescencia en estado puro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario